Examen de Próstata
La esperanza de vida de los varones aumenta y actualmente en nuestro país supera los 80 años. Todos los varones a partir de la edad adulta comienzan a padecer síntomas urinarios que están vinculados al crecimiento de la próstata. Además, el cáncer de próstata es el más frecuente en los hombres mayores. No sólo queremos vivir más sino también vivir mejor. Queremos estar libres de síntomas urinarios que condicionen nuestra calidad de vida y queremos un diagnóstico precoz y certero del cáncer de próstata si es que este acontece. La revisión prostática es un procedimiento médico crucial para evaluar la salud de la próstata en los hombres.
¿Cuándo deben los hombres hacerse un examen de próstata?
Según la Sociedad Americana del Cáncer, los hombres deben tener su primer examen de próstata a los 50 años. Si tienes antecedentes familiares de cáncer de próstata, deberías considerar hacerte tu primer examen de próstata a los 45 años.
El chequeo o examen prostático tiene como objetivos:
- El diagnóstico precoz del cáncer de próstata, si lo hubiera
- La evaluación de síntomas del tramo urinario inferior conocidos como síntomas prostáticos.
- Descartar la presencia de infecciones prostáticas o prostatitis.
¿Qué pruebas de próstata incluye mi chequeo?
- Evaluación de síntomas con entrevista y cuestionarios.
- Evaluación del flujo urinario con un flujómetro o con el cuestionario ANUF:
- Ecografía urológica.
- Solicitud y evaluación del valor en sangre del PSA:
- Tacto Rectal
Evaluación de síntomas con entrevista y cuestionarios
Generalmente el servicio de atención al paciente le entrega un cuestionario con unas preguntas validades que evaluarán la manera que usted orina. Se medirá su dinámica miccional con preguntas como: ¿Cuántas veces se levanta por la noche para orinar? ¿vacía usted la vejiga tras cada micción? ¿tiene la sensación de no vaciar completamente la vejiga con la micción? ¿tiene Ud. prisa urgencia, apremio por llegar al baño? El cuestionario validado se denomina IPSS y sus síntomas se clasifican en leves, moderados o severos y de llenado o de vaciado.
Pruebas Complementarias
La flujometría libre
Es una prueba urológica que mide la velocidad y el volumen de la orina mientras se micciona. Es un examen no invasivo que evalúa la función del tracto urinario inferior, especialmente en pacientes con síntomas de obstrucción urinaria o problemas de micción. El paciente orina en un dispositivo llamado flujómetro durante la prueba. Este dispositivo registra la cantidad de orina eliminada y el tiempo que tarda en hacerlo. Esto crea una curva de flujo que muestra el volumen miccional, que es la cantidad total de orina eliminada, y el flujo máximo (Qmax), que es el valor máximo alcanzado por el flujo urinario durante la micción. Los resultados de la flujometría pueden ayudar a identificar problemas como la hiperplasia benigna de próstata, los estrechamientos uretrales y la debilidad del músculo de la vejiga también llamado detrusor. Es crucial medir el residuo postmiccional, que es la cantidad de orina que queda en la vejiga después de la micción. Esta prueba es simple, no requiere preparación adicional y no causa dolor al paciente.
Ecografía de próstata
La ecografía urológica es un método de diagnóstico por imagen que utiliza ondas de ultrasonido para tomar imágenes detalladas de los órganos del sistema urinario y reproductor masculino. Es un procedimiento no invasivo, seguro y sin dolor que ayuda a los médicos a evaluar y diagnosticar una variedad de afecciones médicas.
La ecografía urológica permite la visualización de los riñones, la vejiga, la próstata y los testículos. Este examen es crucial para detectar anomalías como tumores, cálculos renales, quistes y signos de infecciones urinarias.
¿Cómo se lleva a cabo?
El paciente se coloca en una camilla y se le expone la parte abdominal y pélvica durante la ecografía urológica. El transductor (que emite y recibe ondas de ultrasonido) se mueve más fácilmente cuando se aplica un gel conductor sobre la piel. Las imágenes capturadas se muestran en tiempo real en un monitor, lo que permite a un médico examinar los órganos examinados de manera exhaustiva.
Preparándose para una ecografía urológica
Por lo general, este examen no requiere preparación especial. Se recomienda beber agua y no orinar antes del procedimiento porque es importante que la vejiga esté llena durante la prueba.
Las ventajas de la ecografía urológica
- No agresiva: No se requiere incisión ni se utilizan agujas.
- No emite radiación: La ecografía, a diferencia de otras pruebas de imagen, no utiliza radiación ionizante.
- Rápido y efectivo: La mayoría de las ecografías urológicas se realizan en menos de 15 minutos.
- Diagnóstico fiable: Permite una identificación precisa de afecciones urológicas.
- Resultados del examen de ecografía urológica: Una variedad de condiciones, como obstrucciones en el flujo urinario, cálculos, tumores o alteraciones en la estructura de los órganos, pueden indicar resultados anormales. Los hallazgos pueden sugerir pruebas adicionales o tratamientos específicos.
Análisis de sangre con los valores del PSA
La piedra angular en el chequeo prostático del varón es el PSA en sangre. Todo el mundo ha oído hablar del PSA, pero pocos saben lo que es. Concretamente es una peptidasa secretada por la próstata que hace que el semen sea líquido y permite la viabilidad de los espermatozoides. Desde un punto de vista más práctico podríamos considerarlo como un marcador de actividad prostática, es decir, no es sólo un Marcador de Cáncer de Próstata. De hecho, cualquier actividad en la próstata puede elevar el PSA.
No hay un punto de corte oficial que pueda determinar si tienes o no cáncer de próstata.
En cambio, a partir de cierto valor que oscila entre 2,5 y 4 ng/ml convenimos la necesidad de otras pruebas como la biopsia de próstata.
Si tienes un PSA alto se puede deber a tres patologías: la Hiperplasia Benigna de próstata HBP (una próstata grande eleva el PSA), la Prostatitis y el temido cáncer de próstata. Pero también otras circunstancias como una larga tirada en bicicleta, las relaciones sexuales o el propio tacto rectal puede elevar el PSA. En definitiva, en ocasiones es obligatorio hacer una biopsia de próstata que resuelva las dudas.
En cualquier caso, cuando un paciente acude a Urosalud con un PSA elevado lo que hacemos es solicitar una segunda analítica que vuelva a medir los valores del PSA y susodichas analíticas deben estar separadas unas dos semanas entre ellas. Si el PSA sigue elevado se debe solicitar una resonancia magnética multiparamétrica. Y sólo cuando la resonancia o el PSA sugieren que hay cáncer, se solicita la biopsia de próstata por fusión.
Exploración Física
Examen de próstata con tacto rectal
El tacto rectal es un paso importante en el examen prostático.
El tacto rectal es una exploración física esencial para detectar problemas prostáticos tempranos, como el cáncer de próstata. Uno de los métodos más directos para evaluar la condición de la próstata es este examen sencillo y rápido
¿Cómo se define el tacto rectal?
El tacto rectal es un examen en el que el médico introduce un dedo en el recto del paciente con un guante lubricado. La próstata, ubicada justo delante del recto, puede palparse para encontrar cualquier irregularidad o alteración en su tamaño y consistencia.
¿Cómo es el tacto rectal?
El procedimiento se realiza en el consultorio del médico y no requiere de una tecnología alguna. El tacto rectal no es doloroso y dura solo unos minutos. El médico puede detectar nódulos, endurecimiento o irregularidades en la superficie de la próstata durante este período. El tacto rectal evaluará: tamaño, consistencia, características de la superficie y si está móvil o adherida a estructuras vecinas.
¿Cómo es el tacto rectal normal?
Un tacto rectal objetiva una próstata elástica, del tamaño de una castaña, superficie lisa y móvil o no adherida a estructuras vecinas.
Es importante recordar que una próstata normal no significa que no haya cáncer.
¿Cómo me preparo para un examen de próstata o tacto rectal?
Se necesita poca preparación antes de un examen de próstata. Sin embargo, asegúrate de informarnos si tienes condiciones existentes que podrían causar incomodidad, como hemorroides o fisuras.